Tipos de dependencia
El acto de fumar es una conducta compleja que se basa por una parte por la adicción física y por otro por el hábito que se adquiere al fumar continuamente y durante años. Se diferencia tres tipos de dependencia que actúan sobre el síndrome de abstinencia: Dependencia física, psíquica y social.
La nicotina tarda diez segundos en llegar al cerebro y comenzar a estimularlo. Cada calada vuelve a estimular las neuronas del cerebro y refuerza las ganas de volver a fumar. Calcula todos los cigarrillos que te fumas cada día, las caladas que das a cada uno y multiplícalo por los 365 días de un año. Son decenas e incluso miles de caladas que asocias a lugares, actividades y sentimientos concretos.
Comparada con otras drogas, la nicotina es eliminada rápidamente del cuerpo; en dos horas ya se ha eliminado la mitad. Este descenso tan brusco hace que rápidamente aparezcan los síntomas del síndrome de abstinencia y ese malestar se ve reforzado por cada vez que se hace algo que se suele hacer con un cigarrillo en la mano.
La adicción física está causada porque la concentración de nicotina en el torrente sanguíneo va disminuyendo rápidamente y en un plazo muy corto de tiempo comienza a provocar una sensación de malestar que solo desaparece al fumar de nuevo. Estos síntomas son variados y cada fumador con mayor o menor intensidad, puede padecer des de ninguno, a uno o varios diferentes, Por eso, aunque leas esta lista, no tienes que pensar que vas a pasar por todos ellos:
- “Craving” o necesidad imperiosa de fumar.
- Ansiedad o ira
- Dificultad de concentración
- Estreñimiento
- Insomnio o trastornos del sueño
- Aumento del apetito
- Tristeza
- Tos
La duración media de la dependencia física es de casi un mes, siendo del cuarto al quinceavo día donde el síndrome de abstinencia a la nicotina es más intenso.
A fumar se aprende. Los primeros cigarrillos y caladas llegan a ser incluso desagradables en la mayoría de personas. Pero poco a poco, el pitillo se incorpora como una rutina diaria más. Esto es debido a tres elementos fundamentales:
- Practica:
Al largo de la vida se pueden llegar a fumar de 50.000 a 300.000 cigarrillos, pocas cosas en una vida se realiza tantas veces. Por eso, después de haber fumado tantas veces se acaba automatizando esta conducta. Así muchas veces puede ser que lo hagas sin pensar y que te encuentres fumando sin saber realmente por qué. Es como caminar, cuando ya hemos aprendido lo hacemos sin darnos cuenta.
- Asociación:
El cigarrillo se acaba asociando a numerosas actividades que hacemos durante todo el día, por lo que cuando las hace automáticamente le vienen ganas de fumar, como por ejemplo llamar al teléfono, tomando café o alcohol, viendo la televisión,…
- Refuerzo:
Aparte de lo dicho, cada vez que se fuma se obtiene sensación de placer y de alivio de los síntomas de abstinencia que refuerza las ganas de fumar
La duración de la dependencia psicogestual es de 2 a 3 meses.
Esta dependencia surge cuando nos encontramos en reuniones, con amigos, en fiestas, discotecas,… Es la responsable de las recaídas cuando se lleva mucho tiempo sin fumar incluso años. Es el típico “por uno no pasa nada”, pero lo que pasa es que realmente es lo contrario. Un fumador, aunque haya dejado de fumar, guarda en su cerebro una memoria y si vuelve a fumar, aunque solo sea un cigarrillo, las ganas de fumar vuelven como si nunca se hubiera dejado.
Si quieres ayuda y consejos para dejar de fumar clica aquí